consejos para tener sexo con un heterosexual

Consejos para tener sexo con un heterosexual

Tips para hombres gay que desean seducir a un heterosexual

Más de una vez te habrás sentido atraído profundamente por el marido de tu amiga, el capitán de fútbol de la escuela, el guardia de seguridad del edificio o cualquier otro heterosexual que crees que jamás se acostaría con un gay como tú. No es una batalla perdida, pero sí requiere trabajar totalmente diferente a como seducirías a un hombre gay para ayudarlo a cruzar la línea. Estos consejos para tener sexo con un heterosexual pudieran ayudarte.

Si es la primera vez que lo conoces y él se queda observándote por un rato sin desviar la mirada ni sentirse avergonzado de que lo veas a los ojos, es porque ya descubrió que eres gay, así que en un futuro cercano puedes sentirte con la confianza de pedirle su amistad para empezar a verlo.

Debes mirar al hombre con seducción discretamente y observar su reacción. Pero nunca le hables de sexo.

Si se trata de un heterosexual conocido que te gusta y que lo has sorprendido mirándote, algunas veces con exaltación o sugestividad, también quiere decir que tienes oportunidad de continuar con el juego de la conquista.

Hazte su amigo y gánate su confianza

Conviértete en su compañero de actividades. Si te pregunta qué tipo de mujeres te gustan dile que has tenido muy feas experiencias con las mujeres. Quizás su siguiente pregunta sea si eres gay o no, así es que prepárate para salir del clóset con él.

Pasa a ser su compinche, su compañero de estudios y de fiestas heterosexuales; acompáñalo a sus deportes, sé presencia absoluta en su vida. Más adelante, al final de alguna actividad, busca la posibilidad de que roces su pierna o dar algún otro toque “inocente” efímero. Es muy importante que te fijes en su reacción, porque si hace un gesto de incomodidad, entonces debes desistir por el momento. Y si se deja, es carta blanca.

Sé como una madre para él

Los hombres heterosexuales por lo general están cansados de dar y de ser siempre los que protegen y proveen. También les gusta recibir consuelo en la adversidad, ser abrazados como si fueran niños, y que le acaricies el cabello asegurándole que todo va a estar bien, que todo mejorará. Recuerda siempre estar de su parte en la situación que lo aqueja. Cuando lo abraces, hazlo fuerte, por largo tiempo y acaríciale el rostro, la espalda y no lo sueltes.

Si su problema es de pareja con su esposa o novia, lo mejor es no opinar, solo consuélalo.

Crea la atmósfera propicia para que él se excite

Busca un momento adecuado para incitar su sexualidad con estímulos visuales. Prueba primero con una película sensual como Sucker Punch o una cinta con Angelina Jolie o Meghan Fox. Muy importante, no olvides ofrecerle su licor favorito para que se desinhiba. Para los más atrevidos, usa directamente una película porno heterosexual o lésbica; evita la pornografía gay, porque corres serio riesgo de incomodarlo.

La regla de oro en estas conquistas es ratificarle con tus comportamientos y palabras que él es heterosexual – no gay ni bisexual– y que nadie nunca se enterará de la intimidad entre ustedes.

Manos a la obra: cosecha tu siembra

En esta última etapa de la conquista usa vestimenta deportiva como un short que muestre tus piernas y si te sientes cómodo mostrando más piel, sácate la camisa. De vez en cuando, fíjate en su entrepierna y asegúrate que él perciba que lo miras con deseo.

Cuando su erección es ya evidente, ofrécele tu mano amiga. Acaríciale el pene por encima de la ropa y si él expone su miembro, puedes masturbarlo o practicarle el sexo oral. Si él no se desnuda pero no le hace resistencia a tus avances, ten confianza de que puedes tomar control.

Recuerda que esta no es una relación sexual con otro hombre gay y que requiere mucho trabajo, tiempo y confianza. Y no todos los heterosexuales están dispuestos a explorar esta área de su sexualidad, por lo que debes estar listo también para aceptar su rechazo.